Hace ya unos días que mis entrenos se han visto entrecortados, la verdad que ni me encuentro mal, ni ninguna lesión me afecta, ni voy super saturado de trabajo de la universidad, pero hay veces que la vida te muestra un camino y hay que decidir si dejas el que llevabas y coges la nueva vía o decides quedarte como están las cosas. Si algo he aprendido es que problema = solución y sino la tiene, deja de ser un problema y no vale la pena dejarse el cuello en ello.
Las crisis pueden ser un nido de oportunidades ya que muchas veces las situaciones difíciles hacen replantarnos las cosas y nos dan ese empujón que nos hace falta para asumir nuevos retos y ser valientes. Para pasar del ¿Y si…? Al Yes we can!
Mis más allegados ya están al corriente, que salga todo bien. y aunque el sueño de ir a Lanzarote a conseguir el preciado billete a la otra isla sigue invadiéndome cada noche, ahora comparte cama con otra ilusión. En esta vida hay que saber priorizar, ahora es momento de centrarme un poco en el futuro y si hay que dejar algún entreno de lado, por mucho que me duela, hay que hacerlo.
Aun así no pienso renunciar a todo el sacrificio hecho hasta ahora y aunque quizás no pueda llegar tan bien como quisiera (creo que el 99,9% de los atletas nunca llegan todo lo bien que quisieran) pienso ir a por todas y volver con el orgullo de saber que he dado lo mejor de mi sea cual sea el resultado, al fin y al cabo es a mí al único que debo rendir cuentas y no todo lo bueno de esta vida se encuentra en Hawai (aunque me gustaría ir para corroborarlo). Así pues, como un gran puzzle, las piezas poco a poco van encajando en su sitio y van dando forma al nuevo proyecto.
En breve habrá más información, de momento toca terminar de atar cabos sueltos y poco a poco ir desvelando el secreto.
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